Como todos sabemos, desde 2011 se inició una Guerra Civil en Siria que, todavía a día de hoy, sigue en pleno auge. El conflicto ha provocado mas de 230.000 muertes, ha generado 11,5 millones de desplazados y un total de cuatro millones de refugiados han tenido que salir de Siria, huyendo en muchos casos de los campos de refugiados internos situados en territorios amenazados por la guerra o el dominio de El.
Muchas de esas personas no pueden más y arriesgan su vida de cualquier manera para escapar de su país por una guerra llena de temores, sin importarles en las condiciones infrahumanas que viajarán e inclusive si llegarán a su destino; lo único que buscan es la paz y tranquilidad, anteponiéndolo a todo.
La palabra clave para sentirnos como ellos es empatía. Ponernos en la situación de ellos puede provocar un escalofriante miedo, miedo de perder a tu familia, tus amigos, tu hogar, tu trabajo, en fin, perder tu vida, tu todo y abandonar tu país de la forma más ruin, con el único fin de cumplir un sueño…escapar de esa masacre. Sólo en el momento en que extrapolamos su situación, podemos comprender cómo se sienten y cómo nos gustarían que nos tratasen sí fuésemos nosotros los que nos encontrásemos en esa situación.
Muchos de los refugiados buscan su sueño en Europa y otros mucho vienen a España para intentar cumplirlo, y nosotros, como Estado Social debemos de ayudarlos y socorrerlos del temor por el que vienen huyendo.
Desde el punto de vista jurídico, hago un llamamiento a todos los abogados/as para que protejan sus derechos y los asesoren legalmente, ya que como seres humanos, lo necesitan. Una de las formas de ayudar a estas personas vulneradas por una guerra es la de Registro de Abogados especializados en materia de inmigración y asilo para abordar la asistencia jurídica de los refugiados y personas desplazadas creado por el Consejo General de la Abogacía Española. Esa asistencia se prestará tanto a nivel nacional y local, como en los denominados hotspots (puntos calientes europeos) para colaborar in situ con los abogados y autoridades de los países afectados si así lo demandasen.
Esta acción es muy interesante y a la vez eficaz, con el único fin de regularizar su estancia en nuestro país, garantizando todos sus derechos humanos, asegurando una vida digna y posibilitándoles un futuro tan anhelado para ellos.
Mª Antonia Gallardo. Alumna en prácticas en el Departamento Jurídico de ÁREA ABOGADOS.